Julio de 2007. Se recibe aviso en el Parque de bomberos de Azuqueca de Henares a consecuencia de una niña cuyo brazo ha quedado atrapado en el tubo de desagüe de la depuradora de su piscina, en el término municipal de Uceda.
La dotación de bomberos se moviliza hacia el lugar del siniestro y solicita al servicio de emergencias la presencia de personal sanitario.Cuando la dotación llega, advierte que la víctima es una niña de 3 años, atendida por su padre y el médico de la localidad.
Está en perfecto estado, pero tiene el brazo metido en el tubo de la depuradora y se ha quedado atrapada sin poderlo sacar. El tubo tiene forma de embudo y ha generado vacío, lo que hace imposible la extracción de la mano sin la rotura del mismo.
Se coloca una silla en el fondo de la piscina para que se apoye la niña, y uno de los bomberos de la dotación le intenta tranquilizar con canciones y algunos juegos mientras el resto de la dotación procede a picar alrededor del tubo para descubrirlo y proceder con su corte. Durante estas operaciones, se cubre a la niña con una toalla para evitar que vea el trabajo realizado y con la única intención de seguir tranquilizándola.
Cuando el tubo, construido en PVC y recubierto por cemento, queda liberado, se corta con una sierra de mano y finalmente se consigue extraer el brazo sin causar daños a la víctima.
